Ir al contenido principal

Una Mujer Fuerte


¿Qué es realmente una mujer fuerte?
¿Una que aspira a ordenar en algo la vida de sus hijos, sabiendo que algunas veces, será no oída...? pero que pacientemente, seguirá en su insistencia, que su vida decurre... aun estando sola o acompañada ... en dar fortaleza y presentando fuerzas que ella no tiene, pero que las saca del todo y de la nada, para cumplir sus objetivos.
¡Qué duro es demostrar fortaleza, sabiendo que hay que sacarla igual... porque todos la esperan!

¿Una mujer fuerte, o una mujer de fortaleza?
Una mujer fuerte hace ejercicios todos los días para mantener su cuerpo en forma... mientras que una mujer de fortaleza se arrodilla a orar para mantener su alma en forma.
Una mujer fuerte no teme a nada... mientras una mujer de fortaleza demuestra valor en medio de su temor...
Una mujer fuerte a nadie permite que le quite lo mejor de ella, mientras que una mujer de fortaleza da lo mejor de si a todos.
Una mujer fuerte comete errores y los evita en el futuro... mientras una mujer de fortaleza se da cuenta que los errores en la vida también pueden ser bendiciones de Dios, y aprende de ellos.
Una mujer fuerte camina con pasos seguros... mientras una mujer de fortaleza sabe que Dios la ayudará si cae...
Una mujer fuerte muestra en su rostro una expresión de confianza... mientras una mujer de fortaleza muestra una expresión de gracia.
Una mujer fuerte tiene fe en que tiene fuerza suficiente para el viaje mientras una mujer de fortaleza tiene fe que el viaje la hará más fuerte.

Autor: Carolina Córdova
México

Comentarios

Entradas populares de este blog

La prueba final de amor

John X se levantó del banco, arreglando su uniforme, y estudió la multitud de gente que se abría paso hacia la Gran Estación Central. Buscó la chica cuyo corazón él conocía pero cuya cara nunca había visto, la chica de la rosa. Su interés en ella había comenzado 13 meses antes en una Biblioteca de Florida. Tomando un libro del estante, se encontró intrigado, no por las palabras del libro sino por las notas escritas en el margen. La escritura suave reflejaba un alma pensativa y una mente brillante. En la parte del frente del libro descubrió el nombre de la dueña anterior, la señorita Hollys Maynell. Con tiempo y esfuerzo localizó su dirección. Ella vivía en Nueva York. Él le escribió una carta para presentarse y para invitarla a corresponderle. Al día siguiente, John fue enviado por barco para servir en la Segunda Guerra Mundial. Durante un año y un mes, los dos se conocieron a través del correo, y un romance fue creciendo. John le pidió una fotografía, pero ella se negó. Ella sentía

La inquietante historia de una niña ingenua chateando en Internet

El anonimato que permite la red es un peligro para los menores Los menores suelen estar solos ante los peligros de la red. Esta historia llegó al correo electrónico del director de El Confidencial Digital, Javier Fumero, que la publicó en uno de sus artículos. El caso de esta niña se podría dar en cualquiera de los hogares de nuestros lectores: Tras dejar sus libros en el sofá, ella decidió tomar un bocadillo y meterse en Internet. Se conectó con su nombre en pantalla: ‘Dulzura14′. Revisó su lista de amigos y vio que ‘Meteoro123′ estaba enganchado. Ella le envió un mensaje instantáneo Dulzura14: Hola. Qué suerte que estás! Pensé que alguien me seguía a casa hoy. Fue raro en serio! Meteoro123: RISA. Ves mucha TV. Por qué alguien te seguiría? No vives en un barrio seguro? Dulzura14: Claro que sí. RISA. Creo que me lo imagine porque no vi a nadie cuando revisé. Meteoro123: A menos que hayas dado tu nombre online. No lo hiciste, verdad? Dulzura14: Claro que no. No soy estúpida, Ok! Meteoro