Novena de la Inmaculada, Primer día En este primer día de la Novena con que queremos honrar a Nuestra Madre del Cielo, hacemos el propósito firme, ¡tan grato a Ella!, de recurrir a su intercesión en cualquier necesidad en que nos encontremos, siguiendo el consejo de un Padre de la Iglesia: "Si se levantan los vientos de las tentaciones, si tropiezas con los escollos de la tentación, mira a la estrella, llama a María. Si te agitan las olas de la soberbia, de la ambición o de la envidia, mira a la estrella, llama a María. Si la ira, la avaricia o la impureza impelen violentamente la nave de tu alma, mira a María. Si turbado con la memoria de tus pecados, confuso ante la fealdad de tu conciencia, temeroso ante la idea del juicio, comienzas a hundirte en la sima sin fondo de la tristeza o en el abismo de la desesperación, piensa en María. En los peligros, en las angustias, en las dudas, piensa en María, invoca a María. No se aparte María de tu boca, no se aparte de tu corazón; y para ...